Cómo combatir el cabello graso
Si tú eres una de ellas y no sabes cómo ponerle solución a este problema, te damos algunos trucos para el cuidado del cabello graso.
1. Sigue una buena rutina de lavado
Se ha extendido la idea de que es malo lavarse el pelo todos los días porque cuanto más lo lavas, más graso se vuelve. Pero si has probado a estar muchos días sin lavarlo, habrás comprobado que no es cierto: lavarlo menos, no reduce ni regula la grasa.
¿Cuántas veces puedo lavarlo entonces? La respuesta es que puedes hacerlo cuantas veces sea necesario y, si tienes exceso de grasa, seguramente tenga que ser con bastante frecuencia.
Ten cuidado con la temperatura. El agua caliente estimula las glándulas sebáceas así que intenta evitarla. Lo aconsejable para cabellos grasos es utilizar agua tibia, con un aclarado final de agua fría. Esto ayudará a que el cabello tarde más tiempo en ensuciarse de nuevo.
A la hora de aplicarte el champú, hazlo con un suave y corto masaje. De esta manera, evitarás el efecto rebote que se produce cuando te enjabonas con demasiada fuerza y eliminas el manto hidrolipídico del cuero cabelludo.
Un último factor clave para combatir el cabello graso será elegir el mejor momento para realizar tu rutina de lavado. Siempre que puedas, lava el cabello por la mañana. Las glándulas sebáceas están menos activas y esto se notará en el resultado final.
2. Utiliza los productos adecuados
Para no dañar el cabello ni el cuero cabelludo, más que el número de lavados, es importante tener en cuenta la calidad y las características de los productos que usemos.
En nuestra web podrás encontrar productos especiales para el tratamiento del cabello graso que incorporan principios activos muy eficaces para controlar el exceso de grasa. No se recomienda utilizarlos más de dos veces a la semana, por lo que se suele aconsejar alternar el champú específico para cabello graso con un champú neutro de uso diario.
Y si eres de las que te gusta terminar tu ritual de cuidado del cabello con mascarilla, aplícala sólo en las puntas, sin tocar las raíces.
3. Un básico para tu supervivencia: el champú seco
Para esos días en los que no tienes tiempo ni ganas de lavarte el pelo, el champú seco será tu aliado.
Aplícalo sobre las raíces, déjalo actuar un minuto y retira el exceso de producto con un cepillo o directamente con las manos.
En un abrir y cerrar de ojos, cambiarás el aspecto graso y sucio de tu cabello por otro limpio y con volumen,
4. Evita el calor
Las altas temperaturas estimulan la sobreproducción de grasa capilar, por lo que será una cuestión importante a tener en cuenta en el cuidado del cabello.
Como decíamos antes, se desaconseja el uso de agua caliente.
Y lo mismo ocurre a la hora del secado; si utilizamos secador, tenemos que hacerlo siempre a temperatura media para evitar agravar el problema.
5. El cepillo cuanto más lejos, mejor
A ninguna nos gusta ir con pelos de loca pero, si no lo tienes muy despeinado ni demasiado enredado, es preferible que no te peines. Peinar empeora y ensucia el cabello graso así que es mejor peinarlo sólo cuando realmente hace falta.
Cuando lo hagas, procura evitar las raíces para no repartir la grasa capilar por todo el cabello.
¿Conoces más trucos para combatir el cabello graso? Compártelo con nosotras en los comentarios
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